Seguro que si eres de los ochenta o noventa y te hablan de biometría te viene a la cabeza la imagen de la película Blade Runner, donde a Harrison Ford se le reconoce por el iris al principio de la película. Quizá eres más de Minority Report, con Tom Cruise utilizando múltiples aplicaciones biométricas… básicamente, y de lo que trata el post, es que en ambas películas entra en juego la biometría.
¿Qué hay de real en eso de las películas?
En una palabra: mucho. La biometría está presente en cualquier aspecto de nuestra vida, sólo hace falta que mires a tu alrededor. O mejor aún, mira en tus manos: ¿a que probablemente tú… si tú que nos estás leyendo tienes un Smartphone con lector de huellas para desbloquear la pantalla? ¿Incluso con reconocimiento facial o de retina?

Recuerdo que cuando mi hijo mayor era pequeño le medía la temperatura corporal con un termómetro que le acercaba a la frente, sin necesidad de ponerle uno de los de mercurio en la axila, y eso me recuerda a cuando yo veía la serie de Star Trek.
Entonces, ¿qué es la biometría?
Para quien aún no sepa de qué estamos hablando, os damos una definición de biometría: se trata de una tecnología de identificación de personas que consiste en el reconocimiento de la misma mediante una característica fisiológica (huella dactilar, reconocimiento de iris, voz, facial…)
Todo muy bonito pero, ¿a qué problemas se enfrenta la biometría?
La biometría nos facilita la vida, en eso estaremos todos de acuerdo. Pero también hay casos en la que puede complicárnosla, debido a la aparición de cibercriminales que se dedican principalmente a:
- Robo de credenciales
- Suplantación de identidad
Por ejemplo, los cibercriminales han conseguido replicar una huella dactilar gracias a las impresoras 3D y claro, ya no hace falta cortarle el dedo como en las películas a la otra persona.

En el mundo de ciberseguridad actual, uno de los puntos en los que más inversión e investigación se está realizando es en la protección de los datos personales de los usuarios. Se ha detectado que los usuarios usan en la mayoría de los casos contraseñas inadecuadas, inseguras y que no cumplen unos mínimos de seguridad por lo que sus datos pueden ser robados por cibercriminales en la red.
Desde el Grupo Santander trabajamos duramente desde el área de Ciberseguridad Global y Local de todos los países en los que tenemos representación para mantener a nuestros clientes y a sus datos a salvo.
¿Qué más aplicaciones usan biometría en el mundo real?
A pesar de los posibles problemas de ciberseguridad, la biometría ha llegado para quedarse. Ha ayudado a muchos usuarios a sustituir el uso de su contraseña para autenticarse en un sistema o en una app, y para realizar pagos desde el móvil con Bizum o Wallet de forma más ágil y sobre todo de forma más segura. Y esto son solo un par de ejemplos.
También está siendo ampliamente empleada en control de acceso en organismos públicos, empresas o incluso en domicilios.

Estamos exprimiendo la biometría cada vez más y viendo usos más avanzados para sacarle mayor partido:
- En el sector automoción se está estudiando la posibilidad de reconocimiento facial para detectar si el conductor se duerme. Iniciando alguna alerta que ayude al conductor a despertarse y evitar accidentes.
- En pasos fronterizos, la Policía Internacional está trabajando con sistemas avanzados de reconocimiento facial para detectar y comprobar los posibles antecedentes de quienes cruzan la frontera.
Biometria en las grandes empresas
La mayoría de grandes empresas están optando por este método de acceso, ya que es muy preciso y evita suplantaciones. Permite identificar a la persona en pocos segundos y te facilita la vida evitando tener que recordar claves o incluso llevar las antiguas tarjetas identificativas. Sin ir más lejos, los empleados del Grupo Santander utilizamos nuestro Smartphone corporativo para acceder a los edificios, parkings o comedores.
Autores: Joan Rodríguez y Beatriz Rodríguez
Santander Global Tech